martes, 3 de julio de 2012

Pendientes de cápsulas

Era taaaan temprano... Y yo tenía taaanto sueño... Y allí, en aquella oficina, me ofrecieron un café de una Nexpreso. Nunca había probado el café de esas cafeteras, pero aquello estaba riquísimo. No sé si era un estómago no muy lleno, las 8 de la mañana o el sueño que tenía, el caso es que me sentó genial. Y no sé cómo, llegaron a mis manos las cápsulas del café.
Poco a poco empecé a aplastar una de las cápsulas y vi que aquello estaba tomando forma. Había visto otras cosas hechas con las cápsulas, así que me aventuré a crear unos pendientes... ¡¡Y este es el resultado!!
Ahora he visto en internet que no me lo he inventado yo, que ya está inventado. Pero como es una creación más, aquí os la dejo, ¿qué os parece?